MÉXICO, DF, 6 de julio de 2015.- Petróleos Mexicanos (Pemex) y el Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (STPRM) firmaron dos convenios para la cancelación de unas mil plazas sindicalizadas en los complejos petroquímicos Escolín, Poza Rica, y Tula, Hidalgo.
De acuerdo con El Financiero, se trata de los convenios CAS 10759/2014 para Escolín, y CAS 10760/2014 para Tula, que entraron en vigor en noviembre de 2014 y tienen un plazo de cumplimiento de hasta nueve meses, por lo que deberán concretarse máximo en agosto.
Por parte de Pemex firmaron Víctor Díaz, director de Administración y Servicios, y Marco Murillo, subdirector de Recursos Humanos y Relaciones Laborales, mientras que por el sindicato firmaron Carlos Romero Deschamps, dirigente nacional del STPRM y los secretarios generales de las secciones 30 (Escolín) y 35 (Tula).
Representantes sindicales señalaron que el STPRM no hizo público esos convenios y consideraron que lo pactado es la “antesala” a la revisión contractual 2015-2017 que se realiza en julio para reducir la plantilla sindical.
El acuerdo CAS 10759/2014 indica que derivado del cierre definitivo de operaciones del Complejo Petroquímico Escolín (Poza Rica) de Pemex-Petroquímica, se cancelarán unas 700 plazas sindicalizadas adscritas a ese centro de trabajo.
Por su parte, el CAS 10760/2014 señala que empresa y sindicato acuerdan cancelar al menos 230 plazas definitivas sindicalizadas adscritas al Complejo Petroquímico Tula de Pemex-Petroquímica.
Los convenios de Escolín y Tula tienen como fundamento la cláusula 20 del Contrato Colectivo de Trabajo (CCT) que otorga “amplias facultades” al patrón para adecuar su organización, reducir puestos, reacomodo, liquidación, ascensos y descensos de los trabajadores, así como en la cláusula 134 relativa a las jubilaciones.
El dirigente del Grupo Unido Regeneración Sindical, Federico Mora, afirmó que el objetivo de la empresa es adelgazar la plantilla sindical y para ello se aplica la cláusula 20 que deja en “indefensión” a los trabajadores.
“La empresa siempre maneja dos términos en los convenios, que son cancelación y reubicación, pero cuando cierran centros de trabajo como en Poza Rica, ya no se reacomoda a los trabajadores y las cancelaciones de plazas pueden convertirse en jubilaciones”, dijo.